Canción suya [Santón Ropero] a una mujer que traía grandes caderas: cuando andaba, parecía que amblaba.
Gentil dama, singular,
honesta en toda do[c]trina,
mesuraos en vuestro amblar,
que por mucho madrugar
no amanece más ahína.
Las nalgas bajas terreras,
mezcladas por lindo modo,
poco a poco, y no del todo,
el traer de las caderas.
Y al tiempo del desgranar,
qu[e] el hombre se desatina,
mesuraos en vuestro amblar,
que por mucho madrugar
no amanece más ahína.
Deja tu comentario