Mira que soy niña,
Amor, dejamé,
¡ay, ay, que me moriré!”.
Paso, Amor, no seas
a mi gusto extraño,
no quieras mi daño,
pues mi bien deseas;
Basta que me veas
sin llegar teme:
“¡Ay, ay, que me moriré!”,
No por ser rapaz
Amor al quererse,
tiene de comerse
su fruta en agraz.
vivamos en paz,
amas quedensé:
“¡Ay, ay, que me moriré!”
No me hagas riña
lo que me alboroza,
que soy tierna y moza,
soy medrosa y niña,
sin cerner, ¿la viña
quieres que te dé?
“¡Ay, ay, que me moriré!”.
No seas agora,
por ser atrevido,
desagradecido
con la que te adora;
que si se desdora
mi amor y tu fe:
“¡Ay, ay, que me moriré!”.
No seas injusto,
ni me causes daños,
ten miedo a mis años,
ya que no a mi gusto,
que de aqueste susto
grande mal tendré:
“¡Ay, ay, que me moriré!”.
Estima mi vida
si estimas gozarte,
que no he de negarte,
cuando se me pida;
verasme crecida,
y tuya seré:
“¡Ay, ay, que me moriré!”.
Deja tu comentario